La firma de joyería Pandora nos ha abierto las puertas de su casa. Para muchos este acto implica intimidad y confianza. ¿Qué más se le puede ofrecer a una clientela fiel? Por eso acudimos al Paracaidista; para conocer la esencia de la chica Pandora a través de un viaje por #CasaPandora.
Para recrear el espacio #CasaPandora, la marca ha contado con la ayuda de Luis García Fraile,
decorador de interiores y responsable de darle vida a las estancias que
componen la casa: la
cocina, antigua y con guindillas como adorno pero con cierta dosis de
modernidad, se convierte en una de las estancias principales; un jardín
en el que nunca faltan las flores y una bañera lista para sumergirse en
ella, son el núcleo.
Pero, ¿qué sería de una chica Pandora sin su vestidor? En esta ocasión el vestidor lo llena la Ana Locking. Aunque aparentemente pueda parecer que no hay elementos en común entre su trabajo
vanguardista y el clasicismo que emana la firma de joyería, su afán por
promover la capacidad creativa de la mujer las ha unido en este proyecto. La diseñadora ha llenado el closet con cinco piezas pertenecientes a su
colección de verano "The Thinker", confeccionados
en toile, un tejido con el que los diseñadores de alta costura
simulan sus prendas antes de elaborarlas con las telas definitivas. Todos los diseños están complementados con joyas que la marca ha creado en exclusiva
para la ocasión.
#CasaPandora sirve para poder adentrarnos en el universo Pandora y qué mejor manera de hacerlo que escarbando entre sus cajones para poder disfrutar y conocer la nueva colección de la firma. Además de las nuevas piezas de joyería y de los ya famosos charms, tuvimos la oportunidad de ver, in situ, cómo se crean. Bajo la atenta mirada de los visitantes, un grupo de artesanos elaboraba diferentes charms y cuentan en materiales como el cristal de murano o la plata.
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