Desfile Etxeberria #MBFWM

Para acabar con los desfiles de esta edición de la MBFWM, hablamos de la colección que Roberto Etxeberria presentó en la pasarela madrileña. Etxeberria nos tiene acostumbrados a los juegos de materiales y formas, con elementos como la piel (seña inconfundible del diseñador vasco) y con la colección de Primavera-Verano 2016 lo ha vuelto a conseguir.

"En plein air" así denomina Etxeberria a una colección compuesta por tres retos. El primero de ellos es apostar por un único material, en este caso el seersuker (una tela de algodón fina, normalmente de rayas, usada en la sastrería masculina). Es un reto que, teóricamente puede no tener la importancia que tiene ya que crear múltiples outfits y looks con un mismo material, no es fácil. Reto superado. 

En segundo lugar, el diseñador juega con las declinaciones del clásico english drape para conseguir un estilo mucho más joven, moderno y casi irreverente, gracias a volúmenes insospechados, mangas XL y declinaciones del sastre par la mujer en clave oversize.

Por último, Etxeberría se atreve con la cerámica en los complementos. En esta ocasión firmados por Carme Balada. Collares, pulseras y cuellos se funden con los outfits de manera natural y sin falsas pretensiones. 

Tras ver la colección, una se da cuenta de que no solo ha superado con creces el reto sino que, además, nos queda mucho por hablar del diseñador vasco que ya en 2014 recibió el Premio Nacional de Moda al Nueva Valor. Por algo ha desfilado en Nueva York.