El pasado fin de semana estuvimos en una visita guiada que organizó el Museo Thyssen dentro de la iniciativa #MadridEsModa impulsada por la Asociación Creadores de Moda de España (ACME).
La Historia del Arte y de la Moda avanzan en paralelo en este recorrido de algo más de una hora, donde nuestras miradas se posaron en los tejidos, las texturas, los colores y las formas de la moda occidental a través de las obras de la colección, de autores como Mondrian, Juan Gris, Degas o Zurbarán, que abarcan desde el siglo XV hasta el XX. Una iniciativa gratuita en la que, además de visitar una de las mejores colecciones privadas, gracias a una maravillosa guía reparamos en detalles pequeños pero que ofrecen una gran información sobre la época.
El viaje a través de cinco siglos de historia los hemos resumido en cinco cuadros en los que a través de la vestimenta (tejidos, colores...) nos comunican cómo va cambiado paralelamente la moda.
Jacques Daret: La adoración del niño (1934-1935)
La obra fue realizada durante el periodo de mayor esplendor del ducado de Borgoña en el que el lujo y la elegancia marcaron la pauta en el resto de las cortes europeas. Prendas y telas refinadas y suntuosas que recuerdan el aire recargado del gótico flamingero, en el que los cuerpos femeninos se ciñen bajo el busto, al tiempo que las cabezas se adornas con complicados tocados.
Anton van Dyck: Retrato de Jacques Le Roy (1631)
Desde comienzos del siglo XVI, la gorguera o pieza que cubría el cuello, fue adquiriendo mayor tamaño y tomó forma rizada o escarolada pasando a denominarse "lechuguilla". Su uso se extendió entre los caballeros de la alta sociedad convirtiéndose en un signo de privilegio aristocrático.
François Boucher: La toilette (1742)
Esta obra permite que nos introduzcamos en el espacio íntimo de una mujer en su lujosa vivienda del siglo XVIII. En este siglo el enorme prestigio de Versalles dominó el mundo de la moda y la elegancia rococó se impuso entre las clases sociales acomodadas. Es a partir de este momento cuando se produce el desarrollo de la industria de la moda y la aparición de láminas, revistas y maniquís contribuyó a su rápida difusión por Europa.
Thomas Lawrence: Retrato de David Lyon (1825)
De la mano del retratado nos adentramos en la estética y la elegancia del dandismo, cuyo máximo exponente fue el inglés George Brummell. La suntuosidad de la indumentaria en la ropa masculina de épocas anteriores desaparece dando paso a la sobriedad y la discreción. A un dandi se le reconocía por el arreglo de su corbata, el cuello de la camisa almidonado, su pelo corto y el rostro afeitado.
Juan Gris: El fumador (1913)
Existe controversia sobre el origen del esmoquin. Solo hay constancia de que a mediados del siglo XIX se denominada "smoking jacket" a una confortable chaqueta masculina utilizada específicamente para fumar y posteriormente, con algunas modificaciones, se convirtió en un traje para ocasiones formales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario